¿Pero hasta cuándo? Bosques de niebla,
glaciares y páramos... todas coberturas
naturales amenazadas por el cambio climático. La Autoridad de Cuenca, incluyendo cuencas
transnacionales, es una decisión estratégica
para garantizar un manejo integrado de las
actividades productivas y el uso de los recursos
de la cuenca de manera coordinada. Esta
Autoridad debe tener la capacidad de diseñar
y el poder para asegurar el cumplimiento de
un Plan Maestro de largo plazo, teniendo en
cuenta los probables efectos del cambio climático
en su respectivo territorio. Adicionalmente,
la posible bonanza en los próximos años, por
ejemplo, en las cuencas glaciares por efecto de
la deglaciación, así como la inminente escasez
de agua, en épocas secas o de estiaje, después
de llegar al punto de no retorno, requiere de
acciones planificadas desde hoy.
lunes, 31 de diciembre de 2012
Delineando las políticas estratégicas - I
1] EL AGUA Y LA GESTIÓN DEL TERRITO RIO
El bienestar y el progreso permanente de
los habitantes es el resultado del manejo
integrado y cuidadoso de todos los recursos
de las cuencas de la región andina.
Ante la disminución de los recursos hídricos, una adecuada gestión del agua será determinante para los próximos años. |
La dinámica hídrica de las cuencas no sólo es importante
para la producción de alimentos, sino
también es muy útil para generar energía eléctrica
y para abastecer de agua dulce o potable a
los centros poblados, a los asientos mineros, a
las actividades agrícolas y a las industrias que
transforman las materias primas de la región.
Todos los centros poblados dependen del curso
del río que les asegura la vida, particularmente
las grandes ciudades donde se concentra la mayor
parte de la población de los países andinos,como es el caso de Bogotá, Quito, Lima y La Paz.
Un modelo destacable es el planeamiento para
abastecer de agua potable a Quito, una ciudad de
2 millones de habitantes, para los próximos 50
años. El Proyecto de Ríos Orientales captará el
agua del drenaje de los glaciares de los volcanes
Antisana y Cotopaxi. En Bogotá, cerca del 70%
de la población consume el agua proveniente del
Parque Natural Chingaza, caracterizado por la
presencia de bosques de niebla y páramos. Lima
tiene como fuente de agua las cabeceras de los
ríos Rimac y Chillón y La Paz depende en parte
del glaciar Chacaltaya.
domingo, 30 de diciembre de 2012
Los desafíos de la subregión andina - III
Indudablemente, lo que está en
discusión es el cómo mejorar
la calidad, la focalización y la
efectividad del gasto público y
los programas sociales, a la luz
de los desafíos que implica el
Cambio Climático: la escasez, la
incertidumbre y el incremento de
la ya elevada vulnerabilidad de la
región, especialmente de ese 55%
de la población.
El PIB per cápita es un indicador muy utilizado
para clasificar el nivel de desarrollo económico
de los países. Los niveles alcanzados por la Comunidad
Andina están aún por debajo del nivel
promedio de América Latina. De acuerdo al nivel
de este indicador se clasifica a los Países en desarrollados
o en vías de desarrollo. Este concepto
está vinculado a la disponibilidad de bienes y
servicios finales por una persona promedio en
un año. Es decir, tener más cosas es estar mejor y
es ser más desarrollado. Es evidente que cuando
no se dispone de lo básico para una vida digna,
se necesita aumentar el consumo de lo indispensable
en una sociedad del siglo XXI.
Pero la gran pregunta es si es deseable
alcanzar el contenido y las cantidades
del PIB per cápita promedio de los
países llamados desarrollados.
En primer lugar, si se quisiera... no se podría si
se mantienen los parámetros de consumo actuales
que ignoren el concepto de sustentabilidad. No
hay los recursos en la Tierra para producirlos. Y
en segundo lugar, el tener más no significa necesariamente
ser más desarrollado. Insistimos, el
PIB per cápita no mide el desarrollo de una persona
respecto a los ideales que profesa,
los valores que norman
su conducta, la creatividad de
su intelecto, sus expresiones
artísticas, la solidaridad con
su comunidad, la responsabilidad
y eficiencia en su trabajo,
el cuidado y compromiso con
su entorno natural y ambiental,
entre otras múltiples dimensiones
de la calidad de las
personas y de sus relaciones
con la sociedad.
Para lograr una mayor calidad
humana no se necesita todo lo que
se produce en el mundo.
Los mayores conocimientos y las mejores
conductas originan mayor bienestar personal y
armonía social, en el marco de una vida material
austera y garantizando el acceso a los servicios
básicos modernos. Un estilo de vida semejante
sí podría incluir a toda la población, sin depredar
y agotar los recursos de la Tierra.
Los desafíos de la subregión andina - II
Todas estas dimensiones de la vida cotidiana
también son parte del nivel de vida de los pueblos.
En última instancia, la felicidad es un sentimientode plenitud por los logros alcanzados, por el amor
de la pareja y de los hijos, por la generosidad de los
amigos, por la verdad conocida, por la belleza del
paisaje, por la devoción religiosa, entre muchas
otras vivencias del ser humano que dan sentido
y significado a sus vidas.
El poseer más cosas materiales
genera una sensación de bienestar y
muchas de ellas son indispensables
para vivir. Pero, también hay que
reconocer que la razón de ser de la
existencia humana no se limita tan
sólo a consumir para sobrevivir.
Desde otra perspectiva, el Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD ) califica
a los países de la CAN en el rango medio
del Índice de Desarrollo Humano (ID H), aunque
existen grandes desigualdades al interior
de los países.
Se reconoce, por otro lado, el avance de los
países andinos en la satisfacción de las necesidades
básicas de su población, particularmente
en las ciudades, durante los últimos 30 años;
así como el esfuerzo de los gobiernos, para ampliar
la cobertura de los programas sociales
para atender la demanda de la creciente población.
Ello se expresa en la voluntad política para
incrementar el gasto fiscal. Sin embargo,
este esfuerzo no ha sido suficiente, porque el
55% de la población todavía está por debajo de
la línea de la pobreza, siendo la situación de las
poblaciones rurales bastante más alarmante:
éstas suman alrededor de 30 millones. Esta es
la población que vive en las laderas andinas, en
los páramos y punas, en los llanos, en el bosque
seco y en la amazonía. Por eso se reclama
una estrategia de crecimiento económico con
inclusión social.
Los desafíos de la subregión andina - I
Las Montañas Andinas, un lugar para vivir bienLas montañas forjan en gran medida el temperamento,
los sentimientos y la visión de los pueblos
andinos. Los valles coloridos, los llanos calurosos,
los cerros imponentes, las praderas ondulantes
y la inmensidad del bosque amazónico,
penetran en el alma de la gente y se expresan
en sus rostros. El paisaje tiempla el carácter,
modela la arquitectura y anima la vida de los
pueblos. Cada región es singular. Se distinguen
por la musicalidad al hablar, en los ritmos de sus
fiestas, en los sabores y aromas de sus comidas,
en la policromía de sus vestidos y en los santos
y vírgenes que adoran y celebran. Naturaleza y
cultura se fusionan en la literatura, en la pintura
y escultura y en las fiestas populares.
sábado, 29 de diciembre de 2012
Investigaciones prioritarias para la región:
Investigaciones prioritarias para la región:
Escenarios de Cambio Climático regionalizados para la CAN .
Efecto que podría tener la elevación de la temperatura y cambio de precipitación sobre el rendimiento de los principales cultivos de
la región y la industria pesquera (efecto del calentamiento sobre la productividad del mar).
El efecto del calentamiento sobre el Fenómeno El Niño. Si aumentara la frecuencia e intensidad de este evento podría elevarse sustancialmente
el daño económico que podemos asociar con las catástrofes naturales y así la cifra estimada para el daño total.
Efecto que podrían tener los cambios sobre las fuentes de agua, precisando a cuánto ascenderían las inversiones necesarias para
reemplazarlas si estas se viesen afectadas por el cambio del clima.
Valoración de los servicios ambientales de algunas áreas o coberturas naturales prioritarias (p.e el Amazonas, los páramos,
los glaciares), efectos sobre la biodiversidad y cuantificación de los costos, teniendo en cuenta las considerables pérdidas que
podrían registrarse por este concepto, que podrían además ser irreversibles.
El mundo al revés
Los estudios sugieren que las regiones más afectadas
son: África, la India y los países del sur de
Asia, América Latina y Europa. En contraste,
las que menos pérdidas tendrían son: China,
Estados Unidos, Canadá, Rusia y otras economías
industriales de Asia. Como se muestra,
parecería que el daño económico potencial estuviera
correlacionado negativamente con la
intensidad de la contaminación.
Resulta paradójico que los países menos
vulnerables a los daños sean los que
generan mayores emisiones por unidad
de PIB. Para América Latina, el daño
estimado para un aumento de solamente
1ºC en la temperatura oscila entre 0,5% y
2% del producto interno bruto.
Fuente: Panorama Económico Mundial, Ciclo de Negocios y de Vivienda, abril 2008, Fondo Monetario Internacional |
Este además es solamente un promedio, lo
ideal sería contar con un estimado que discrimine
según regiones climáticas. La mayor riqueza
de los países de la CAN, así como los menos estudiados
pero más importantes impactos, están
en su biodiversidad, en su variedad de climas,
ecosistemas y pisos ecológicos, en su diversidad
de cultivos, en ser centro de origen de muchos
de los productos de seguridad alimentaria del
mundo. ¿Qué conocemos de la magnitud de su
afectación? Verdaderamente, muy poco.
Se requiere una amplia cooperación
para la investigación en los países
de la CAN, para llegar a un estimado
del costo de las pérdidas que refleje
las afectaciones del Cambio Climático
en la diversidad que representa
la región andina.
viernes, 28 de diciembre de 2012
¿Por qué es tan elevado el costo del cambio climático en la CAN ?
Un daño económico
estimado entre 1,5% y 2,5%
del producto bruto interno
en un país desarrollado,
puede equivaler, en una
economía de ingresos
medios, a pérdidas
potenciales entre 2,5% y
4% del PIB.
Los estudios, en particular para
los países que integran la Comunidad
Andina, muestran que el
daño potencial no es uniforme
en todo el mundo, pues el mismo
puede tener variaciones locales
que dependen del país o región
considerados.
En particular, el daño económico
tiende a ser mayor si la temperatura
inicial es mayor a la promedio,
ya que en este caso no se
materializan los beneficios que
podrían provocar, especialmente
en la agricultura, pequeñas variaciones
en la temperatura. En
efecto, si el incremento en ésta
es moderado, en los países con
una temperatura inicial menor
al promedio, podrían registrarse
aumentos en la productividad de
la agricultura, pero descensos
en los países con temperaturas
iniciales más altas. También, el
aumento de la temperatura reduce
las muertes en los países
con temperatura menor, pero las
puede aumentar en aquellos con
temperatura mayor.
Además de la temperatura inicial,
otro poderoso determinante
de la intensidad y de la extensión
del daño es el nivel de desarrollo
económico. La importancia porcentual
en el producto interno
bruto de los sectores más sensibles
al cambio climático es mayor
en los países de menores ingresos,
porque en ellos la agricultura
juega un papel fundamental
en la generación del empleo y el
valor de la producción. En estos
países, como los de la CAN, la
vulnerabilidad de la población
es probablemente mayor, dada
la menor disponibilidad de servicios
públicos, el menor desarrollo
institucional y el poco desarrollo
de los mercados financieros. Finalmente,
la capacidad de adaptación
ante los cambios, debido al
menor desarrollo institucional,
es menor en los países de inferior
desarrollo.
Metodología aplica da pa ra la estimación del daño económico
Se ofrece un vistazo sobre la extensión probable
de los daños a futuro en la subregión andina
basados en los resultados que han arrojado los
estudios ya realizados para las economías industriales,
el conocimiento que tenemos sobre
el daño que provocan los eventos extremos y, el
conocimiento de las consecuencias del cambio
climático para algunas regiones geográficas
que ya cuentan con estudios parciales.
Para la estimación se definió una función
que vincule las pérdidas de producción con el
aumento de la temperatura. Los parámetros de
dicha dependen de las particularidades del proceso
de producción o del efecto considerado, por
lo que se clasificaron los efectos en dos clases
fundamentales: los impactos de mercado y los
impactos que caen fuera de la esfera del mercado.
Los primeros incluyen los efectos directos
del Cambio Climático sobre las industrias que
son sensibles a los mismos: agricultura, ganadería,
pesca, agua y energía, mientras que los
segundos involucran las consecuencias indirectas
que se pueden derivar de los impactos
directos sobre toda la economía, que son: los
efectos sobre la salud, ecosistemas, actividades
recreativas y herencia cultural.
Modelos base utilizados para la estimación de los costos
Existe una subestimación de los daños
que pueden provocar los eventos
extremos en los modelos, los cuales
consideran los impactos en un año
“promedio”, sin tener en cuenta que los
principales impactos económicos tienden
a concentrarse en los años irregulares.
Existen importantes limitaciones
en la incorporación de todos
los efectos involucrados en el
impacto económico del Cambio
Climático, como son: la pérdida
de biodiversidad, el efecto
de las catástrofes, el riesgo de
los eventos climáticos extremos
y el impacto de desorden
e intranquilidad social.
Existe una distorsión considerable
de los estimados ya
que los incrementos en la temperatura
global en que se basan
los estudios son menores a
los proyectados en los últimos
escenarios del IPCC.
En Colombia y Perú - las mayores
economías de la región
- se concentraría la mayor parte
del daño potencial, pero en
ellas su importancia relativa
podría ser menor que en Bolivia
y Ecuador, en donde el daño
total sería menor, pero de
mayor importancia relativa.
Esto se debe a las diferencias
que existen en las estructuras
productivas de los distintos países
y a la desigual importancia
de los sectores sensibles al
Cambio Climático.
La distribución de los
daños estimados entre
los distintos países de la
subregión depende del
tamaño total de cada
economía y de su nivel de
desarrollo relativo.
jueves, 27 de diciembre de 2012
Un Vistazo al Futuro Económico de los países de la Subregión Andina - II
El costo estimado de las pérdidas sería mucho mayor si se consideraran en toda su amplitud los costos indirectos que causa el Cambio Climático, así como los escenarios que proyectan que el Fenómeno El Niño puede ser más frecuente e intenso. Escenarios de Cambio Climático desarrollados para una zona del Perú(7), indican que el Fenómeno El Niño será más intenso, y muy probablemente más frecuente. Si incorporamos esta posibilidad en la estimación de los costos en la subregión andina, es altamente probable que uno de los componentes más importantes del potencial daño económico sea el aumento de la probabilidad de ocurrencia de este tipo de catástrofes. Este aumento en el riesgo asociado a estas catástrofes extremas aumentaría sustancialmente el impacto del cambio climático, y por tanto, la cifra de costos de las pérdidas presentada anteriormente. Basta solamente recordar que el Fenómeno El Niño 97/98 significó entre 4,5 y 14 % del producto interno bruto en los países de la subregión (exceptuando a Colombia).
Un Vistazo al Futuro Económico de los países de la Subregión Andina - I
Al año 2025, el daño económico en
los países de la Comunidad Andina
significaría una pérdida aproximada
de 30.000 millones de dólares anuales(5)
equivalentes al 4.5% del PIB, pudiendo
comprometer el potencial de desarrollo
de todos los países de la región.
Si bien se trata de una cifra preliminar es extremadamente
importante en magnitud, pues
es similar al gasto que se asigna a salud en la
subregión. Un 4,5% de pérdida del PIB equivale
a lo que se destina en promedio como gasto
de salud pública (4,4% del PIB) de acuerdo a
cifras del 2004 y alrededor del 80% de lo que se
destina a educación (5,5% del PIB) de acuerdo
a cifras del 2002-2005 (6). Los países de la CAN
presentan aún brechas importantes que cubrir
en materia de pobreza, inequidad, salud y educación.
Impactos económicos como los calculados
pueden ampliar e incrementar la ya elevada
vulnerabilidad de sus poblaciones.
El estimado del daño económico es conservador
dado que involucra principalmente daños
proyectados en las industrias sensibles a variaciones
climáticas: agricultura, pesca, agroindustria,
agua, electricidad, infraestructura.
Las metodologías aplicadas por países desarrollados
no incorporan otros costos que para
la subregión son extremadamente importantes.
Estos han sido incorporados conservadoramente,
pero bajo la premisa que no se tiene
información suficiente. Sobre ellos se requiere
prioritariamente un estudio posterior - pérdidas
en biodiversidad, cultura, paisajes, impactos
en desorden e intranquilidad social.
miércoles, 26 de diciembre de 2012
Los Grados que Cambiarán nuestros Andes Amazónicos
Impactos climatológicos del Fenómeno El Niño en América Latina y el Caribe - II
Durante las últimas tres décadas, la región se
ha visto sometida a impactos climáticos severos
derivados, entre otros, de la mayor frecuencia
de eventos El Niño. En ese período, ocurrieron
dos Mega Niños, extremadamente intensos (en
1982/83 y 1997/98) y otros eventos severos que
resaltaron la vulnerabilidad de los sistemas humanos
ante desastres naturales (inundaciones,
sequías, heladas, deslizamientos de tierra).
Ahora, no es sólo el Fenómeno
El Niño el que produce catástrofes en los países de la subregión. También lo son los eventos que se presentan de manera regular, ¡cada año! La gestión de los riesgos es un tema pendiente. Las afectaciones por fenómenos climáticos extremos han ido incrementándose, dado que las áreas y sistemas (infraestructura, producción, población) han ido también en aumento, sin incrementarse las actividades de prevención o la capacidad de respuesta. Las poblaciones pobres son las más afectadas, pues ellas sobreviven, ubicándose o trabajando generalmente en zonas de riesgo. Las estadísticas muestran que desde el quinquenio 2002 - 2006, con respeto al quinquenio 1987-1991, las hectáreas de cultivo afectadas se han incrementado alrededor de 6 veces.
El Niño el que produce catástrofes en los países de la subregión. También lo son los eventos que se presentan de manera regular, ¡cada año! La gestión de los riesgos es un tema pendiente. Las afectaciones por fenómenos climáticos extremos han ido incrementándose, dado que las áreas y sistemas (infraestructura, producción, población) han ido también en aumento, sin incrementarse las actividades de prevención o la capacidad de respuesta. Las poblaciones pobres son las más afectadas, pues ellas sobreviven, ubicándose o trabajando generalmente en zonas de riesgo. Las estadísticas muestran que desde el quinquenio 2002 - 2006, con respeto al quinquenio 1987-1991, las hectáreas de cultivo afectadas se han incrementado alrededor de 6 veces.
No existe una sola provincia de los países de la
CAN que no haya presentado al menos una vez
un desastre hidrometeorológico desde 1970.
martes, 25 de diciembre de 2012
Impactos climatológicos del Fenómeno El Niño en América Latina y el Caribe - I
Este resultado, que puede ser paradójico, es una
consecuencia del patrón no sólo del aumento de
la población, sino del patrón histórico de ocupación
del territorio y de la distribución espacial del
progreso económico. En los últimos cincuenta
años, muchos países aprovecharon las ventajas
naturales que dependen precisamente de las condiciones
que son afectadas por el Fenómeno El
Niño para establecer industrias cuya productividad
estuviera íntimamente ligada a las mismas.
Estas inversiones aumentaron la densidad de la
población en estas regiones y concentraron las
inversiones, de modo que no nos debe sorprender
este aumento en la vulnerabilidad.
lunes, 24 de diciembre de 2012
Una historia de Vulnerabilidades... en aumento
Los países de la subregión andina han sido afectados
por eventos climáticos extremos desde tiempos
remotos. La vulnerabilidad de sus poblaciones ha ido,
sin embargo, en aumento, reflejando una capacidad
de prevención y planificación aún limitada. El Cambio
Climático presenta entonces, un desafío adicional en
el camino hacia el desarrollo.
El Niño y La Niña son fenómenos climatológicos
que configuran gran parte de las amenazas
que se ciernen sobre la subregión. Los llamados
“Mega Niños” han sido la causa de la desaparición
y transformación de las “culturas” andinas
prehispánicas.
El Fenómeno El Niño ha provocado, en todos
los países de la Comunidad Andina, daños severos
en la infraestructura y abruptas reducciones
de los niveles de producción de la agricultura,
pesca, y ramas de la manufacturas que dependen
de los insumos que son producidos en estas
industrias. Estudios realizados en el Perú, sugieren
que este fenómeno aumentará en intensidad
y probablemente en frecuencia por efecto del
Cambio Climático. Ello implicaría que uno de los
componentes más importantes del probable daño
económico sea el aumento de la probabilidad de
ocurrencia de este tipo de catástrofes.
Este aumento en el riesgo asociado a estas
catástrofes extremas puede aumentar sustancialmente
el impacto del Cambio Climático, especialmente,
si consideramos que el grado de
vulnerabilidad de las economías andinas ante
este fenómeno, en vez de reducirse parece aumentar
con el nivel de desarrollo económico.
domingo, 23 de diciembre de 2012
Los impactos del Cambio Climático en la subregión andina
Se Sienten Pasos de Gigante
El Cambio Climático viene evidenciándose en la
subregión andina por más de tres décadas.
Mientras que desde 1990, a nivel mundial, se
registraron cambios en la temperatura global
de 0,2ºC por década, ya desde 1974 a 1998 este
incremento en la región de los Andes Centrales fue
de 0,34ºC; es decir, 70% más que el promedio global.
El calentamiento registrado además intensificó
la tendencia al derretimiento de los glaciares
reportada en el Tercer Reporte del IPCC
(IPCC, 2001), llegándose a situaciones críticas
en Bolivia, Perú, Colombia y Ecuador.
La mayoría de los glaciares están reduciendo
drásticamente su volumen a tasas cada
vez más aceleradas, debido principalmente
Los impactos del Cambio
Climático en la subregión andina
al cambio de temperatura y humedad; y es muy
probable que estos glaciares desaparezcan en
los próximos 15 años, afectando seriamente
la disponibilidad de agua y la generación de
energía (IPCC, 2007).
El número anual de desastres
relacionados con el clima a nivel mundial
se incrementó en 2,4 veces entre el 2000-
2005, en relación al periodo 1970-99,
continuándose la tendencia observada
durante los años noventa. Para los países
de la CAN, este incremento fue similar
en las últimas tres décadas: el doble en el
quinquenio 2002 - 2006, con respecto al
quinquenio 1977-1981.
Un dejavú del futuro
El siglo XXI se ha caracterizado por ser un siglo de anomalías en eventos extremos, y la subregión andina no ha
sido la excepción. El año 2007 y lo que va del 2008, nos han presentado una muestra de lo que podría llegar
a ser nuestra situación, de manera más permanente, si sigue subiendo la temperatura.
sábado, 22 de diciembre de 2012
La agricultura: motor impulsor de las economías locales
La papa, base alimentaria de la región. |
Con la excepción de las grandes ciudades, la
agricultura es el sustento de la actividad económica
de los pueblos andinos, ya que emplea
a la mayor parte de la población y es fuente
importante del ingreso y del abastecimiento
de alimentos de los hogares. Asimismo, es el
impulsor principal de las otras actividades
económicas porque requiere del concurso del
comercio y de los servicios, tanto para acceder
a las semillas y a los otros insumos productivos,
como para facilitar las actividades de
post cosecha para llevar los productos a los
mercados urbanos. Además, por su propia
naturaleza, la agricultura ocupa el territorio
y utiliza los recursos de sus ecosistemas:
agua, suelo, clima.
En los centros poblados se localiza la industria,
las actividades comerciales y los servicios
para procesar los productos agrícolas. Constituyen
además, los espacios donde residen los
hogares de los trabajadores vinculados a estas
actividades. Estos, a su vez, demandan los
bienes y servicios necesarios para vivir en el
ámbito urbano. Todo este tejido de actividades
secundarias y terciarias animan la vida económica
y social de los pueblos que no existiría si
colapsara su núcleo motriz: la agricultura.
APRENDAMOS DE LAS SO CIEDADES ANDINAS
Los antiguos pueblos andinos forjaron de manera
autónoma en este territorio una de las siete civilizaciones
de la historia de la humanidad, como
resultado de la acumulación de esfuerzos y de
experiencias durante más de 11.000 años. Observaron,
comprobaron, aplicaron y compartieron
conocimientos, y fueron capaces de asegurar un
crecimiento sostenido de la producción de alimentos,
aprovechar la diversidad de sus ecosistemas,
disminuir los riesgos de la variabilidad del clima, y
mitigar los efectos de los fenómenos naturales.
Su conocimiento les dio la posibilidad de
predecir los acontecimientos para actuar
oportuna y organizadamente, gracias a una
cosmovisión integradora y armonizadora entre
el movimiento de los astros, los fenómenos
naturales y la biología.
En el mundo andino, cada elemento es una
parte viva de una unidad en movimiento permanente
y cíclico.
Por eso aprendieron a apoyarse
mutuamente y a compensar las pérdidas de unos
con los excedentes de otros, intercambiando recursos
entre las partes altas, frías y húmedas y
las más bajas, calurosas y secas. También, conservaron
sus semillas y alimentos para las épocas
de escasez, y construyeron reservorios para
acumular el agua sobrante.
Por eso lograron la mayor densidad de población
de América del Sur, a pesar de enfrentar un
clima variable y cambiante. Hoy nos toca retornar
al conocimiento milenario que reside en estos
pueblos para aprender a adaptarnos a los nuevos
cambios, pero aún no sabemos si la naturaleza
podrá adaptarse a cambios tan acelerados como
los que las nuevas sociedades les imponen.
La sostenibilidad del stock de
recursos naturales es la garantía de
la prosperidad presente y futura de
los pueblos de la CAN. Si sus climas
se alteran en un período corto de
tiempo, es muy probable que afecten
seriamente la estabilidad de su
economía y con ello, su gobernabilidad.
viernes, 21 de diciembre de 2012
La originalidad de los países andinos - II
La biodiversidad andina, además de ofrecer al
mundo una enorme variedad de especies vegetales
y animales, adaptables a un gran rango de climas y
ecosistemas de la Tierra, es uno de los principales
proveedores de servicios ambientales: todos los
seres humanos le debemos buena parte del oxígeno
respirado a lo largo de nuestra vida.
La conservación y el buen manejo de los ecosistemas
de las montañas andinas tiene una enorme importancia
para la humanidad, ya que constituye
una reserva mundial de la vida, donde se
guarda un gran tesoro1.
La civilización utiliza los recursos ecológicos
más rápido de lo que el planeta puede regenerarlos:
el déficit ecológico del planeta asciende
a unas 22,800 millones de hectáreas. Sin embargo,
en los países de la Comunidad Andina
se encuentran enormes reservas ecológicas,
en contraste con la mayoría de los países que
enfrentan un déficit ecológico.
La región (incluyendo Venezuela y Chile) cuenta
con unas 570 millones de hectáreas de área bioproductiva.
De ellas, unas 200 millones de hec-
La biodiversidad andina, además de ofrecer al
mundo una enorme variedad de especies vegetales
y animales, adaptables a un gran rango de climas y
ecosistemas de la Tierra, es uno de los principales
proveedores de servicios ambientales: todos los
seres humanos le debemos buena parte del oxígeno
respirado a lo largo de nuestra vida.
táreas proveen bienes y servicios, y sirven para
absorber sus propios desperdicios. Por lo tanto,
esta reserva biológica representa unas 370 millones
de hectáreas globales2, valoradas en 115,000
millones de dólares3 que equivalen a la tercera
parte del PIB de los países andinos4.
Por su lado, los bosques amazónicos son un
inmenso organismo vivo que captura CO2 de la
atmósfera y produce oxígeno. Tienen la función
de regular el clima, y de hacer posible el ciclo
del agua, promoviendo la salud general de toda
la vida del planeta.
Este ciclo hídrico continental podría alterarse
permanentemente por la explotación productiva
de los recursos de la amazonía y por el aumento
de la temperatura del planeta, a causa
de las emisiones desmedidas de las actividades
productivas en otros continentes.
Permitir el avance de la desertificación de la
amazonía originaría consecuencias muy graves
para el bienestar de los pueblos de todas las naciones,
por lo que esta función vital para el mantenimiento
del ecosistema debería ser retribuida
por todos para asegurar su funcionamiento.
jueves, 20 de diciembre de 2012
La originalidad de los países andinos - I
miércoles, 19 de diciembre de 2012
EL CAMBIO CLIMÁTICO ES UNA REALIDAD - I
La generación que será testigo de sus
efectos ya está viva y tiene menos
de 33 años. Esta representa el 64%
de la población actual, y sufrirá las
consecuencias en los próximos 42 años
(2008-2050).
Hay un alto acuerdo y una gran evidencia de
que con las actuales políticas de mitigación del
cambio climático, las emisiones globales de gases
de efecto invernadero (GEI) continuarán
creciendo durante las próximas décadas. Para
las próximas dos décadas se proyecta un calentamiento
de 0.2ºC por década para un rango de
escenarios. Incluso si la concentración de todos
los GEI y aerosoles se mantuviera constante al
nivel del año 2000, se espera un calentamiento
de 0.1ºC por década.
Las proyecciones del primer reporte
del IPCC en 1990 estimaban un
aumento de la temperatura promedio
global entre 0.15ºC y 0.3ºC por década
para el período 1990 a 2005. En esa
década, el valor observado fue de
0.2ºC, lo que refuerza la confianza
sobre las proyecciones de corto plazo.
El Cambio Climático es una de las amenazas más
complejas, múltiples y serias que el mundo enfrenta.
En la actualidad ya se están produciendo cambios
ambientales sin precedentes a nivel regional que
se hacen evidentes por las observaciones sobre el
incremento promedio de la temperatura del aire
y de los océanos, por el derretimiento creciente de
los glaciares, la elevación del promedio global del
nivel del mar, así como la recurrencia e intensidad
de los desastres naturales que causan miles de daños
y pérdidas a nivel mundial.
martes, 18 de diciembre de 2012
LA ACTIVIDAD HUMANA HA CONTRIBUIDO A MODIFICAR EL CLIMA DE LA TIERRA - III
“Los países en desarrollo explicarían más
de las tres cuartas partes del incremento de
las emisiones del CO2 entre el 2004 y el 2030.
Ellos superarían a la OECD como los mayores
emisores para el 2012. La participación de los
países en desarrollo en las emisiones mundiales
aumentaría del 39% en el presente al 52% en el
2030. Sólo China sería responsable del 39 % de
las emisiones globales.”
LA ACTIVIDAD HUMANA HA CONTRIBUIDO A MODIFICAR EL CLIMA DE LA TIERRA - II
Como el modelo de
crecimiento económico
ocurrido durante el
siglo XX ha sido muy
desigual entre los países,
es lógico esperar que
la acumulación de las
emisiones del dióxido de
carbono también lo sea.
Los países en vías de desarrollo
superarían en niveles absolutos
a las emisiones de los
países de la Organización para
la Cooperacion Económica
y Desarrollo (OECD, por sus
siglas en inglés) a partir del
2012. Es evidente que ha aumentado
el número de países
responsables de la mayor emisión
de gases en las próximas
décadas, lo que ocasionará, sin
duda, un mayor incremento en
la temperatura media global
y, por lo tanto, la intensificación
de los cambios del clima
en las diferentes regiones del
planeta, afectando la calidad de
vida de la población mundial.
Estos países también deberán
adoptar medidas sustantivas y
efectivas para modificar estas
tendencias y evitar en el futuro
graves consecuencias en el
bienestar de la humanidad.
Se proyecta que la composición
del stock de las emisiones
globales en el 2030 variará
considerablemente debido
al extraordinario dinamismo
de la economía China, con una
población de 1.300 millones de
habitantes, y además, el protagonismo
de nuevas economías
emergentes de algunos países
en desarrollo, como la India,
Brasil y México.
lunes, 17 de diciembre de 2012
LA ACTIVIDAD HUMANA HA CONTRIBUIDO A MODIFICAR EL CLIMA DE LA TIERRA - I
Si se continúa con los patrones
de consumo actuales, el número
de automóviles en el mundo se
incrementará en un 50% para el 2030.
Hoy en día, el automóvil es el símbolo de la modernidad
y del progreso de una sociedad. Las
ciudades se organizan y modelan para facilitar
la circulación de estos vehículos, aunque el
transporte público es el que presta el servicio
de movilidad a la mayor parte de la población.
China es un ejemplo reciente. Su vigoroso crecimiento
económico y la modernización de su
sociedad se manifiestan precisamente, entre
otros indicadores, en la acelerada migración
de la población rural a las ciudades y en el aumento
exponencial de la producción y adquisición
de automóviles.
El Cuarto Informe de Evaluación (2007) del
Panel Intergubernamental de Cambio Climático
(IPCC), en el que trabajaron cerca de tres mil científicos
expertos de todo el mundo, ha dejado establecido
que la concentración atmosférica de gases
de efecto invernadero se ha incrementado como
resultado de la actividad humana desde 1750 y
ahora excede largamente los valores pre-industriales.
La concentración del CO2 en la atmósfera
global se ha incrementado de un nivel pre-industrial
de 280 ppm a 379 ppm en el 2005.
Aproximadamente el 50% de la población mundial vive en ciudades.
La migración de la gente a las ciudades durante
el siglo XX ha sido un proceso avasallador
causado precisamente por las oportunidades
que ofrecen las ciudades para conseguir
empleo, obtener mayor ingreso y mejorar
el bienestar material. Este proceso ha modificado
sustancialmente la ocupación del
territorio en los continentes, ha definido el
patrón de acumulación de capital de las economías
nacionales y también ha acelerado y
ampliado el comercio internacional en todo
el espacio global.
“Las actividades
humanas están
acabando los
recursos y producen
desechos más rápido
de lo que puede
regenerar y procesar
el sistema “
En efecto, durante el último siglo se ha construido una
civilización urbana en torno a la afirmación de lo individual,
la cosificación y mercantilización de las relaciones
humanas, el vértigo de la ganancia, el disfrute de la acumulación
material y la persecución del éxito monetario.
A todo ello se le denomina la sociedad del consumo.
Sin embargo, no todas las regiones del planeta se han
poblado igual, ni tampoco todas las sociedades han acumulado
la misma cantidad de riqueza y bienestar material.
Países con el 20% de la población más rica del mundo
producen el 57% del PIB mundial – basado en la capacidad
de compra paritaria – y emiten el 46% de los gases
de efecto invernadero. De acuerdo al Informe Planeta
Vivo 2004 elaborado por la WWF y Adena, se estima
que si todas las naciones del mundo adoptaran el modo
de vida americano (que consume casi la cuarta parte
de los recursos de la Tierra para el 7% de la población)
se necesitarían de 5 a 6 planetas como la Tierra para
abastecerlas.
Se estima que si
toda la población
de los países
en desarrollo
alcanzara
el consumo
per cápita
de los países
desarrollados,
se necesitaría
los recursos de
algo más de 5
planetas”
Contexto global
Vivimos en un mundo sometido a profundas transformaciones
que afectan las características biofísicas de
los ecosistemas y la calidad de vida de la población.
Esto se da por el crecimiento exponencial de la población;
las innovaciones de la ciencia y la tecnología; la
mayor capacidad para producir bienes y servicios; las
nuevas formas de gestionar la empresa y el trabajo;
los cambios en los estilos de vida y equipamiento en
los hogares; el fortalecimiento de las instituciones internacionales;
y el Cambio Climático en curso.
Hoy día, crecientes segmentos de la sociedad
mundial comparten estas nuevas experiencias
y por eso la globalización es un hecho consumado.
Los verdaderos culpables del Cambio Climático
son nuestros hábitos más cotidianos y las
políticas sin visión de futuro, regidas primordialmente
por intereses económicos.
Desde los orígenes de la humanidad hasta
mediados del siglo XX la población de la Tierra
alcanzó 2.5 mil millones de habitantes. Pero durante
los últimos 50 años, la población mundial
se ha incrementado a 6.5 mil millones de personas
que presionan por obtener niveles de vida
y de consumo similares a los que disfrutan los países desarrollados. Sin embargo, la presión
demográfica será mucho mayor, ya que se proyecta
para el año 2050 una población mundial
de 8.9 mil millones de habitantes.
Durante las últimas cinco décadas,
la producción mundial - PIB –
se ha incrementado 7.7 veces,
mientras que la población ha
aumentado 2.6 veces.
Al mismo tiempo, un vertiginoso crecimiento
económico ha sido motivado e impulsado por
el afán de lograr un mayor bienestar material
para la sociedad. Este esfuerzo ha sido facilitado,
en gran medida, por el avance de la ciencia
y sus aplicaciones tecnológicas orientadas a
descubrir y dominar nuevas fuentes de energía
más eficientes y versátiles con el objeto de
transformar los recursos del planeta. Efectivamente,
la acumulación de la riqueza material
ha sido explosiva y ello ha significado también
una desenfrenada utilización de los recursos
naturales y la producción de todo tipo de desechos
contaminantes del ambiente.
domingo, 16 de diciembre de 2012
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - VIII
Así pues, aun en la medida en que construimos un movimiento de amplia base para luchar por
reformas de verdad en el seno del sistema, para ralentizar el monstruo de un capitalismo
desbocado, movido a base de combustibles fósiles que está creando Frankenstormentas y
muchas más cosas en forma de destrozos ecológicos y sociales, nos hace falta contemplar una
sistema social completamente distinto.
Esto significa ubicar el funcionamiento práctico e ideológico del capitalismo y la degradación
medioambiental en un marco unificado que exige su substitución por un sistema basado en la
cooperación, la democracia real, una producción sostenible dirigida a las necesidades y una Tierra
mantenida en la confianza común de todas las gentes en interés de las futuras generaciones.
Sólo entonces, por medio de ese cambio revolucionario, podemos esperar evitar un
desmembramiento cataclísmico de los ecosistemas globales mediante un cambio climático
antropogénico.
Y el agente de ese cambio no está en las urnas.
Pues hay otro modo de leer el Frankenstein de
Mary Shelley, en el que el monstruo con el que el lector simpatiza, fabricado y traído a la vida por el
burgués Dr. Frankenstein, se encuentra tan enfurecido por su opresión y explotación que
representa el derrocamiento revolucionario de su creador y antagonista.
Dicho de otro modo, el Dr Frankenstein, muy al modo del capitalismo, ha creado su propio
enterrador, en forma de trabajadores, campesinos y comunidades organizadas que deben luchar
en calles, campos y bosques del mundo por nuestra emancipación y la de nuestro planeta.
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - VII
Aunque Nixon fuera incuestionablemente un megalómano de derechas que causó indecibles
sufrimientos, matanzas y estragos ambientales en el Sudeste asiático, se sintió obligado, gracias
a un creciente movimiento de masas sobre el terreno, independiente del Partido Demócrata, a
refrenar el poder empresarial por medio de la creación de la Agencia de Protección Ambiental, la
EPA (Environmental Protection Agency), y poner su firma en una legislación relativa a mucha de las
reglamentaciones más eficaces de las que disponemos todavía en los códigos.
Si bien yo tendería a pensar que el argumento de Nicholas Carne en un reciente artículo de
opinión en el New York Times contradice su afirmación de que vivimos en una “gran democracia”,
ilustra sin embargo lo que está sucediendo en las elecciones norteamericanas:
Se supone que las elecciones están para ofrecer opciones. Podemos recompensar a los que están
en el cargo o podemos echar a los holgazanes. Podemos elegir entre republicanos o demócratas.
Podemos escoger medidas políticas conservadores o progresistas.
En la mayoría de las elecciones, empero, no tenemos voz en algo importante: si estamos o no
gobernados por los ricos. Para cuando llega la jornada electoral, esa elección ya la han tomado por
lo general por nosotros. ¿Les gustaría que les representara un abogado millonario un millonario
hombre de negocios?
Hasta en nuestra gran democracia rara vez disponemos de la opción de
elegir a alguien que no es parte de la élite.
Precisamente. Y estos representantes de la élite patrocinarán e impulsarán medidas políticas que
favorezcan a su clase, no a la nuestra. Y si estas políticas contradicen una realidad más amplia, tal
que ponga en cuestión la estabilidad misma del conjunto del sistema climático planetario, que así
sea.
Lo que significa que estoy bastante más interesado en trabajar con la gente en forjar alianzas
y construir un movimiento de justicia climática con cualquiera que quiera luchar contra la élite
dominante en los 1460 días previos a la próxima competición entre los dos representantes del 1%
empresarial de lo que lo estoy en si alguien está votando por el menor de dos males el 6 de
noviembre.
En estas luchas, hay más probabilidades de que yo haga esto del brazo de los Jóvenes
Evangelistas en Acción sobre el Clima que con Obama y su camarilla de operarios del Partido
Demócrata. Para muchos ambientalistas, parece más fácil imaginar el fin del mundo que el final del
sistema económico y social que llamamos capitalismo. No sólo estoy en desacuerdo con ello
como premisa. Si no nos deshacemos del capitalismo, no quedará mucho mundo que imaginar.
sábado, 15 de diciembre de 2012
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - VI
Si bien mantengo un desacuerdo táctico con respecto a la efectividad del método escogido, no
podría estar más de acuerdo con el portavoz del grupo, Ben Lowe: “Es una larga lucha la que nos
hemos comprometido a librar”. De modo que la pregunta crucial resulta que es: ¿votar por Obama
como el menor de dos males climáticos forma parte de esa larga lucha? Mi respuesta es la misma
que da Chris Hedges en su excelente artículo en Truthdig, y consiste en un definitivo no:
Las elecciones de noviembre no son una batalla entre republicanos y demócratas.
No son una
batalla entre Barack Obama y Mitt Romney. Son una batalla entre el estado empresarial y
nosotros. Y si no nos entregamos a esta batalla de inmediato, estamos acabados, como han
dejado bien claro los científicos…
El estado empresarial ha librado con éxito una campaña de temor para dejar sin poder a votantes
y ciudadanos. Al intimidar a los votantes por medio de un aluvión de propaganda con el mensaje
de que los norteamericanos han de votar por el mal menor y que afirmarse de modo desafiante en
favor de la justicia y la democracia resulta contraproducente, consolida la agenda de dominación
empresarial que tratamos de desbaratar.
Esta campaña de miedo, hábilmente difundida gracias a los 2.500 millones de dólares gastados en
propaganda política, ha silenciado la oposición política real. Ha convertido en parias a esos pocos
políticos y líderes que tienen el valor de resistir, como Stein y Ralph Nader [candidatos del Partido
Verde], a los que se niega voz en los debates y el discurso nacional. Capitulación, silencio y temor,
con todo, no constituyen una estrategia. Garantizarán todo lo que tratamos de evitar.
Tal como apunta Hedges, a lo largo de la historia nuestro bando sólo ha conseguido algo cuando
nos hemos organizado de modo independiente y hemos construido movimientos y partidos
políticos fuera de y en oposición a los partidos y políticos de la corriente dominante.
Tomemos,
por ejemplo, el discurso del Estado de la Nación de Richard Nixon en 1970, que incluye una
extensa discusión sobre la necesidad de afrontar “La gran pregunta de los años 70” y si ¿Nos…
rendiremos a nuestro entorno, o haremos las paces con la naturaleza y empezaremos a reparar
los daños que le hemos infligido a nuestro aire, nuestras tierras y nuestras aguas?
Devolver la naturaleza a su estado natural es una causa que rebasa partidos y facciones. Se ha
convertido en una causa común a todas las gentes de este país. Es una causa de particular
importancia para los jóvenes norteamericanos, porque ellos, más que nosotros, sufrirán las
consecuencias de nuestra incapacidad de actuar en programas que se necesitan hoy si queremos
impedir luego el desastre.
Aire limpio, agua limpia, espacios abiertos, estos deberían ser derechos de nacimiento de todo
norteamericano. Si actuamos hoy, pueden serlo.
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - V
De hecho, aunque la ciencia del cambio climático ha mejorado inmensamente y los
pronunciamientos de los científicos han cobrado cada vez mayor autoridad –por no decir que son
desesperados– ¡ésta fue la primera serie de debates en la que no se mencionó el cambio climático
en una generación!
Desde los tiempos anteriores a las elecciones de 1988, cuando hasta el
candidato republicano a la vicepresidencia Dan Quayle pensaba que se trataba de un problema
que había que enfrentar, no había sucedido que el cambio climático no lo abordaran los
candidatos durante ninguno de los debates.
No sólo carecían los candidatos claramente de interés por arrostrar la cuestión, tampoco lo tenía
la moderadora del segundo debate, Candy Crowley, de la CNN. Pese a una petición firmada por no
menos de 160 mil personas que pedían que los moderadores del debate incluyeran al menos una
pregunta sobre el cambio climático, Crowley excusó su deliberada omisión sobre esta base:
“Cambio climático, tenía la pregunta….Vosotros, la gente del cambio climático, ya sabéis,
nosotros sabíamos que la economía sigue siendo lo principal”. Salvo que los candidatos
consiguieron encontrar tiempo para debatir la cuestión del control de armas, que apenas si guarda
relación directa con la economía.
A decir verdad, toda la razón por la que los candidatos no quieren discutir el cambio climático se
debe precisamente a la economía, concretamente a la economía norteamericana, que depende,
como ninguna otra en el mundo, de la energía de los combustibles fósiles.
Hablando después en una entrevista para la cadena MTV acerca de la absoluta ausencia de
discusión del cambio climático en los debates, Obama expresó su “sorpresa” de que no hubiera
aparecido… ¡como si el presidente de los Estados unidos no tuviera la capacidad de plantear
cuestiones en un debate presidencial!
Esto coloca efectivamente a Obama a la derecha del grupo Jóvenes Evangélicos en Acción sobre
el Clima [Young Evangelicals for Climate Action]. Miembros del grupo compartieron su coche en
ruta al segunda debate en Long Island con el fin de rezar en el aparcamiento para que se
mencionara el cambio climático y adoptara medidas políticas gubernamentales como gravar
fiscalmente las emisiones de carbono y ayudar a los pobres a enfrentarse a los efectos del cambio
climático.
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - IV
De modo que, aunque hayan disminuido las emisiones norteamericanas de carbono debido al
cierre de centrales de carbón, sustituidas por las de gas natural, ha habido una bonanza para las
empresas carboníferas norteamericanas que exportan su producto al exterior, lo que no ha
llevado a ninguna reducción neta de las emisiones de carbono del mundo en su conjunto. En
realidad, el caso es justo todo lo contrario, lo que deja en ridículo el argumento de que el gas
natural es una especie de combustible de “transición” o “puente” a un futuro energético más limpio
(dejando aparte los efectos intensamente contaminantes del proceso mismo de la fractura
hidráulica o “fracking”).
Acaso sea esta la razón por la que la administración de Obama abandonó recientemente su
compromiso de mantener el aumento de la temperatura global por debajo del umbral
absolutamente crucial de 20C, que había adoptado formalmente dos años antes. No ha de
extrañar, pues el número de permisos de perforación otorgados en el Golfo de México va a
sobrepasar la cifra concedida en 2007, y la producción será mayor, tan solo dos años después del
peor desastre medioambiental de la historia de los Estados Unidos:
Dos años después de que la Casa Blanca levantase la moratoria sobre perforaciones en aguas
profundas tras el vertido de BP, los reguladores federales han emitido más permisos que nunca
desde 2007, y mucha gente del sector espera que la producción petrolífera del Golfo de México
pronto supere los niveles anteriores al vertido.
No cabe duda de que esta producción interior extra está ayudando a ConocoPhilips, la novena
mayor empresa del mundo, a hacer ingente caja gracias al ecocidio planetario. ConocoPhilips
anunció sus beneficios del tercer cuatrimestre el 25 de octubre, que llegaron a 18.000 millones de
dólares, aunque la corporación recibe anualmente 600 millones de dólares en exenciones
tributarias, mientras que se asienta sobre 1.300 millones de fondos de reserva, y el antiguo
presidente de la empresa, James Mulva, “ganó” 18,92 millones de dólares como retribución total en
2011.
A la luz de la Frankenstormenta Sandy, apuesto a que Obama habría desearía ahora haber dejado
una pequeña reserva de principios políticos para mencionar al menos el cambio climático en uno
de los idiotizantes debates presidenciales, cuando los dos candidatos, siempre que hablaban de
energía, discutían a ver quién exactamente podía quemar cantidades mayores de combustibles
fósiles y transformar más raudamente la Tierra en un rescoldo de cenizas.
Tal como informa el New York Times, pese al hecho de que “incluso tras un año de temperaturas
que han hecho trizas todos los registros, de sequías y derretimiento de los hielos del Ártico,
ninguno de los moderadores de los cuatro debates de las elecciones generales hizo preguntas
sobre el cambio climático, y tampoco ninguno de los candidatos abordó el asunto”,
aparentemente los candidatos coinciden, no obstante, en que “Pese a todas sus disputas, el
presidente Obama y Mitt Romney están de acuerdo en que el mundo se está calentando y que los
seres humanos son al menos parcialmente responsables”. Sin embargo, el Times reconocía
también que “no queda en absoluto claro qué planea hacer cualquier de los dos al respecto”.
Y además:
A lo largo de la campaña, Obama y Romney parecen haber sido de lo más resueltos en
superar al otro como amantes del carbón, el petróleo y el gas natural, los mismos combustibles
responsables de los crecientes niveles de dióxido de carbono en la atmósfera.
viernes, 14 de diciembre de 2012
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - III
Nunca ha resultado tan pertinente el comentario de Karl Marx sobre la naturaleza del capitalismo
en el Manifiesto Comunista: La moderna sociedad burguesa, con sus relaciones de producción, de
intercambio y propiedad, una sociedad que ha hecho aparecer como por magia tan gigantescos
medios de producción y de intercambio, es como el hechicero que ya no es capaz de controlar los
poderes del mundo de las tinieblas a los que ha invocado con sus encantamientos.
En este punto, conforme las atronadoras tormentas corren disparadas por la Costa Este de los
Estados Unidos, y se sufre todavía una sequía sin precedentes en otras partes del país, parece
indiscutible que el sistema capitalista haya puesto la trama entera de la vida en un rumbo de
colisión contra una biosfera y un sistema climático estables. Uno de esos sistemas ha de ceder, y
no hay indicaciones de que vaya a ser el capitalismo.
En la medida en que se está haciendo internacionalmente algo para arrostrar las crisis ecológica y
social inextricablemente entrelazadas, la respuesta parece consistir en hacer trizas los últimos
vestigios de la herencia común por medio de la espada de la privatización.
Concretamente, en términos de producción petrolífera, la cual, junto a otros combustibles fósiles,
tiene que culminar y comenzar a decaer en los próximos cinco años si queremos evitar una cambio
climático irreversible, de acuerdo con la Agencia Internacional de la Energía, las proyecciones
contemplan, sin embargo, que aumente de sus actuales 80 millones de barriles por día a 110
millones de barriles diarios para 2020, pues las compañías petrolíferas buscan explotar sus
reservas y perforar en busca de más.
Junto a los beneficios incrementados de las empresas petrolíferas debido al precio del barril de
crudo, la Era de Obama ha contribuido a conducir a un surtido de nuevas exploraciones y
aumentos de producción que, de acuerdo con un informe de Citibank, significa que los EE.UU.
podrían pronto rivalizar con Arabia Saudí como mayor productor de petróleo del planeta, y
convertir a los EE.UU. en el “nuevo Oriente Medio”:
El Departamento de Energía prevé que la producción norteamericana de crudo y otros
hidrocarbonos líquidos, entre los que se cuentan los biocombustibles, llegará a una media de 11.4
millones de barriles diarios el año próximo. Eso supondría un récord de 40 años para los EE.UU. y
algo justo por debajo de la producción de Arabia Saudí de 11,6 millones de barriles.
Las previsiones
de Citibank para la producción podrían alcanzar de 13 a 15 millones de barriles diarios para 2020,
contribuyendo a hacer de América del Norte “el nuevo Oriente Medio”.
Dado que el presidente norteamericano Barack Obama se ha jactado repetidamente del
compromiso de su administración de tender un oleoducto suficiente para ceñir la Tierra y ha
metido en vereda a Mitt Romney lanzando anuncios en los que se le acusa de ser “contrario al
carbón”, las exportaciones de carbón norteamericanas registran cifras récord debido a la
expansión de otro combustible fósil, el gas natural obtenido mediante fractura hidráulica
(“fracking”).
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - II
La obsesión que se apoderó de Victor, su creciente enajenación del mundo que le hace abandonar
amigos, familia, incluso sustento, tiene su eco a escala global en la insaciable sed de nuevos
campos destinados a la explotación y el crecimiento. El hecho de que la incontrolable búsqueda de
Victor le consumiera en sus llamas cuando su creación se volvió en contra suya no detendrá unas
señales de aviso semejantes que impidan que el capitalismo se devore a si mismo…y se hunda
con el resto del planeta junto a él.
Que el cambio climático inducido por los seres humanos es lo que explica parcialmente el huracán
Sandy,“el mayor huracán en la historia del Atlántico medido con el diámetro de vientos huracanado
(1040 millas)”, lo razona el Dr. Kevin E. Trenberth, distinguido científico emérito de la Sección de
Análisis del Clima del Centro Nacional de Investigación Atmosférica [National Center for
Atmospheric Research]:
Las temperaturas de la superficie marina a lo largo de la costa atlántica han ido discurriendo unos
3 grados centígrados por encima de lo normal en una región que se extiende 800 kilómetros costa
afuera entre Florida y Canadá. El calentamiento global contribuye a esto en 0.60grados.
Con cada
grado centígrado, el agua que retiene la atmósfera sube en un 7% y la humedad da pábulo a la
tormenta tropical, aumenta su intensidad, y magnifica las precipitaciones doblando esa cantidad
comparada con las condiciones normales.
El cambio climático global ha contribuido a unas temperaturas más elevadas en la superficie
marina y los océanos, y a una atmósfera más cálida y húmeda, y sus efectos están en un abanico
del 5% al 10%. La variabilidad natural y el tiempo han proporcionado condiciones acaso óptimas
para que un huracán que discurre en una situación extra tropical se convierta en una tormenta de
enorme intensidad, acrecentada por el influjo del cambio climático.
Conforme el clima continúe calentándose, el efecto no hará más que aumentar, lo que llevará a
sucesos meteorológicos más extremos, inundaciones y sequías, tal como se describía en dos
artículos recientes de Nature.
Y calentarse se calentará. No porque no tengamos respuestas para impedir que esto suceda y
derivemos nuestra energía de otras fuentes que no sean los combustibles fósiles, sino porque
sencillamente es demasiado rentable para cambiarlo. Hay una compulsión inherente al capitalismo,
la fuerza propulsora del beneficio que impulsa a un mayor crecimiento en un bucle de perpetua
retroalimentación, por el que las colosales fuerzas de producción están poniendo a prueba los
límites del planeta a la hora de absorber la paliza que aguanta su biosfera.
Sandy: Frankenstormentas y cambio climático - I
Conforme las atronadoras tormentas corren disparadas por la Costa Este de los Estados Unidos,
y se sufre todavía una sequía sin precedentes en otras partes del país, parece indiscutible que el
sistema capitalista haya puesto la trama entera de la vida en un rumbo de colisión contra una
biosfera y un sistema climático estables. Uno de esos sistemas ha de ceder, y no hay indicaciones
de que vaya a ser el capitalismo.
Si el estudio al que te aplicas tiende a debilitar tus afectos y destruir tu gusto por esos placeres
sencillos en los que no es posible que se mezcle ninguna aleación, entonces ese estudio es
ciertamente ilícito y no le conviene a la mente humana. Si se observase esta regla, si a ningún
hombre se permitiera ejercicio alguno cualquiera que interfiriese en la tranquilidad de sus afectos
domésticos, no habría sido esclavizada Grecia, César le habría ahorrado penurias a su país,
América se habría descubierto más gradualmente, y los imperios de México y Perú no habrían sido
destruidos.
Pocas dudas hay de que estas extrañas tormentas, formadas de manera anormal, son un anticipo
de lo que el futuro nos depara en un sistema económico que interfiriendo “en la tranquilidad de los
afectos domésticos2, ha galvanizado las fuerzas de la naturaleza en una furia de dislocaciones en
choque a medida que bombeamos más gases de los que atrapan el calor a nuestra atmósfera y
más porquería industrial a nuestros pulmones.
Las aguas revueltas del cambio climático están comenzando a desgarrar el tejido de nuestra
biosfera conforme el sistema climático de la Tierra da tumbos en pesadas y torpes sacudidas,
desde la estabilidad relativamente latente y benévola de los últimos 10 mil años, hacia un nuevo
estado climático más volátil y violento, menos hospitalario, antes desconocido para la civilización
humana.
Aludir, por tanto, a la gran obra de horror gótico de Mary Shelley por medio del apelativo de
“Frankenstorm” [Frankenstormenta] por la confluencia del huracán Sandy y un frente frío resulta,
en formas diversas, algo apropiado. Especialmente en la medida en que Shelley misma ofrecía una
crítica simbólica de la dinámica interna del capitalismo y la sociedad de clases en Frankenstein,
captada en la cita de antes, cuando un Victor en conflicto hace recuento de su historia y de las
fuerzas incontrolables que ha desencadenado como resultado de su compulsión por continuar
con su proyecto, pese a las señales de aviso que proliferan en torno suyo.
jueves, 13 de diciembre de 2012
¿HURACÁN O TORMENTA DE INVIERNO?
Sandy comenzó como un huracán de final de temporada que sube del Caribe fomentado, según
muchos expertos, por aguas inusualmente cálidas para esta época del año. A continuación se unió
a un sistema meteorológico grande del Ártico, que aumentó su tamaño y la transformó en una
tormenta de invierno con mucho más poder de lo que hubiera cabido esperar.
El tercer elemento inusual era un sistema de alta presión en la costa este de Canadá que
bloqueaba la ruta de escape de Sandy. Aunque los huracanes suelen girar hacia el este, el sistema
forzó a Sandy a hacer un giro muy fuerte hacia su izquierda, golpeando contra la costa de Nueva
Jersey.
"Muchos, muchos huracanes han amenazado la costa este de los Estados Unidos durante
muchos, muchos años", dijo David Nolan, profesor asociado de la meteorología y oceanografía
física en la Universidad de Miami. "Prácticamente todos se mueven cerca de la costa y, finalmente,
giran a su derecha y se alejan por el mar".
Nolan dijo que probablemente habría sido una tormenta de invierno de las que se forman en esta
época. Debido a que Sandy estaba llegando a la costa exactamente en el momento adecuado, le
dio fuerza a la tormenta.
"En lugar de comenzar de la nada, la tormenta partió de una circulación tan fuerte como un
huracán", dijo.
Los científicos también señalan que las temperaturas mundiales en septiembre rivalizan con las de
2005, el año que el huracán Katrina devastó Nueva Orleans, como las más cálidas de los registros
modernos, de acuerdo con la Administración Nacional Atmosférica y Oceánica de Estados Unidos.
Un estudio aparecido en la publicación Proceedings of the National Academy of Sciences de este
mes, dijo que las posibilidades de huracanes en el Atlántico fueron mayores en los años más
cálidos que se remontan a 1923.
Las temperaturas más cálidas también significan que la atmósfera puede retener más humedad,
llevando más lluvias a muchas zonas. Un informe de la ONU de este año predijo que una mayor
proporción de la lluvia en el mundo caería de forma torrencial durante el siglo XXI, por lo que las
inundaciones serían más probables.
"Las investigaciones más recientes sugieren que el calentamiento global dará lugar a fenómenos
meteorológicos más extremos, como lluvias torrenciales y sequía", dijo Michael Rawlins, que dirige
el Centro de Investigación del Clima de la Universidad de Massachusetts - Amherst.
Rahmstorf dijo que un deshielo récord de del océano Ártico en septiembre también podría haber
ayudado a aumentar la presión en el Atlántico Norte, lo que condujo hacia el oeste a Sandy.
"Yo sería muy prudente", dijo. "Pero no hay razones para sospechar que podría haber una
conexión entre la pérdida récord de hielo marino este verano y la trayectoria de la tormenta".
Investigaciones recientes indican que los gases de efecto invernadero han aumentado las
posibilidades de algunos fenómenos, como la ola de calor de Texas de 2011 o una ola de calor
europea de 2003 que mató a unas 70.000 personas. Los científicos dijeron que es demasiado
pronto para saber si existía una relación con Sandy.
miércoles, 12 de diciembre de 2012
Ecologia, Medio Ambiente y Energias Renovables en la Naturaleza
Sandy acabó con barrios enteros de la costa de Nueva Jersey, sumergió partes de Nueva
York, e hizo que nevara hasta en el sur de las Carolinas.
Enviado por: ECOticias.com / Red / Agencias, 05/11/2012, 08:14 h | (149) veces leída
Una inmensa tormenta azota Estados Unidos
causando estragos con fuertes vientos,
inundaciones récord, fuertes nevadas y apagones
masivos. ¿El principal culpable es el cambio climático
o sólo una gran coincidencia?
Sandy acabó con barrios enteros de la costa de
Nueva Jersey, sumergió partes de Nueva York, e
hizo que nevara hasta en el sur de las Carolinas. Al
menos 50 personas murieron en Estados Unidos, y
al menos 69 en el Caribe, mientras que millones de personas se quedaron sin electricidad.
Algunos científicos dicen que la clave del impacto de Sandy podría ser un choque
extremadamente raro de sistemas meteorológicos, en lugar de temperaturas más cálidas, a las
que los científicos han señalado en otros huracanes y tormentas.
"Es una tormenta híbrida, que combina algunas de las características de los huracanes tropicales
con algunas características de las tormentas de invierno, que actúan con mecanismos
completamente diferentes", dijo Kerry Emanuel, profesor de ciencias atmosféricas en el
Massachusetts Institute of Technology.
Aunque Emanuel cree que hay una clara relación entre el cambio climático y la tendencia general
hacia más huracanes tropicales de mayor intensidad, en el caso de Sandy harían falta estudios a
largo plazo para determinar si el cambio climático ha jugado un papel importante.
Otros científicos dicen que el cambio climático probablemente agravó cualquiera de las
circunstancias únicas que produjeron a Sandy. Entre estos factores causados por el
calentamiento global están la subida de la temperatura de los océanos y el aumento del nivel del
mar, contribuyendo a inundaciones más destructivas y otros daños.
"Un aumento en el nivel del mar hace que las mareas provocadas por las tormentas sean más
peligrosas y continuará haciéndolo en el futuro", dijo Stefan Rahmstorf, profesor de física de los
océanos en el Instituto para la Investigación del Impacto Climático de Potsdam, Alemania.
Los niveles del mar mundiales han subido 20 centímetros en los últimos 100 años, algo que se
atribuye al deshielo de los Polos provocado por el aumento de la temperatura global. "Cada
centímetro añade más daños", dijo Rahmstorf.
Kevin Trenberth, un científico senior en la Sección de Análisis del Clima del Centro Nacional para la
Investigación Atmosférica de Boulder, Colorado, dijo que aun no se ha llegado a un consenso
sobre el tema.
"Es evidente que hay cambios en el entorno en el que todas estas tormentas se están
produciendo," dijo. En cuanto a Sandy, sin embargo, muchas de las condiciones meteorológicas
que se alinearon fueron algo "impredecible". Una tormenta híbrida puede ser una tormenta
explosiva, "lo que podríamos llamar una bomba meteorológica", sin la influencia del cambio
climático.
martes, 11 de diciembre de 2012
MITOS Y VERDADES ACERCA DEL CAMBIO CLIM´ATICO EN BOLIVIA - X
3.10. Podemos predecir los efectos del cambio
climático de una manera muy precisa en
cualquier regi´on del pa´ıs (mito)
Es relativamente com´un el escuchar proyecciones
acerca los efectos del calentamiento global en
el planeta como si estas fueran verdades casi incontrastables.
En particular no se hace menci´on de
las incertidumbres asociadas a estas predicciones.
Si bien es cierto que los modelos que se usan para
estudiar el clima del futuro sugieren claramente
la probabilidad de incremento de eventos extremos
(sequ´ıas e inundaciones por ejemplo) es todav
´ıa muy dif´ıcil el poder saber de manera precisa
los efectos locales, especialmente en una regi´on
como la boliviana, debido a la topograf´ıa y falta de
un registro preciso de informaci´on clim´atica.
En ese sentido es interesante revisar informaciones
que aparecen en medios de prensa locales. A
modo de ejemplo podemos usar declaraciones publicadas
en el peri´odico pace˜no La Raz´on3. En los
mencionados art´ıculos se hacen las siguientes aseveraciones:
a) “El 2004, la temperatura se increment´o en
0,4 grados cent´ıgrados. El 2010 se elevar´a en 0,6 grados, el 2020 en 0,9 y el 2030 en 1,2 grados
cent´ıgrados, si no es m´as, puesto que la medici´on se
hizo en base del crecimiento poblacional, econ´omico
y al consumo de energ´ıa que sobrepasaron lo esperado.”.
b) Los futuros efectos en el pa´ıs est´an espacialmente
bien localizados. Por ejemplo, el art´ıculo del
2 de enero dice que “En el norte, la tendencia ser´a a
incrementar las precipitaciones, en el sur y el Chaco
se acentuar´an las sequ´ıas. En la regi´on de Santa
Cruz se presentar´an inundaciones y vientos fuertes”.
c) Los cambios en la extensi´on de los bosques
secos tropicales y bosques semih´umedos subtropicales
ser´ıan significativos. El art´ıculo del 2 de enero
dice que para “el 2036 el bosque h´umedo subtropical
se reducir´a en un 71,52%”.
Debido a la complejidad antes mencionada,
cualquier predicci´on acerca del futuro del clima del
planeta debe hacerse utilizando modelos matem´aticos
de los procesos f´ısicos, qu´ımicos y biol´ogicos
involucrados. Dado que es imposible conocer con
absoluta precisi´on todas las variables que influyen
el comportamiento del sistema y que no todos los
procesos son entendidos a cabalidad, los datos proporcionados
al modelo a “tiempo cero” (al inicio
del an´alisis) tienen cierto grado de incertidumbre.
Claramente, al ser el sistema que gobierna el clima
un sistema no-lineal, estas incertidumbres, aun peque
˜nas, podr´ıan conducir (y muchas veces as´ı sucede
efectivamente) a predicciones muy distintas,
aun para un mismo modelo.
Con estas dos consideraciones en mente, es claro
que los resultados presentados en los puntos a)
y c) deber´ıan ser proporcionados con un grado de
incertidumbre (aunque en a) se menciona impl´ıcitamente
que existe un error, sin decir cual ser´ıa el
mismo). Por ejemplo, se deber´ıa decir que el incremento
probable de la temperatura se encuentra entre
0.7◦C y 1.1◦C si la estimaci´on del modelo fuera
0.9◦C y la respectiva incertidumbre fuera 0.2◦C. Tal
como se expresan los resultados del estudio, utilizando
alg´un modelo matem´atico seguramente, se
sugiere que los mismos tienen una alta precisi´on
(un error tan peque˜no que ni se lo menciona).
El otro aspecto asociado a estos modelos es que
t´ıpicamente la incertidumbre en las predicciones es
mayor en t´erminos espaciales. Es decir, los modelos
proporcionan resultados significativamente distintos
para regiones o puntos espec´ıficos, aunque los
resultados sean parecidos cuando se promedian en
regiones mucho m´as grandes (por ejemplo bandas
latitudinales o por hemisferios). Esto significa que,
hoy por hoy, nuestra habilidad de predecir cuales
ser´an los cambios espec´ıficos en determinadas regiones
es muy limitada o requieren, cuando menos,
una validaci´on profunda de los modelos que
se usan para realizar dichas predicciones. Las conclusiones
expresadas en b) merecen, por tanto, una
explicaci´on m´as profunda y que se mencione la incertidumbre
asociada. ¿Cu´an probable es que ese
escenario ocurra?
El grado de incertidumbre es muy importante
para poder establecer pol´ıticas relacionadas a los
efectos del cambio clim´atico en Bolivia. Cuanta m´as
certeza se tenga acerca de los efectos puntuales sobre
el pa´ıs mejor se podr´an utilizar los recursos destinados
a paliar esos efectos, e inversamente, cuanta
m´as grande sea la incertidumbre cient´ıfica mayor
la incertidumbre en cuanto a la eficacia de las medidas
ha adoptarse.
lunes, 10 de diciembre de 2012
MITOS Y VERDADES ACERCA DEL CAMBIO CLIM´ATICO EN BOLIVIA - IX
3.9. Los chaqueos reducen el calentamiento global
(verdad y mito)
Esta es una verdad a medias. Los chaqueos o
quema deliberada de biomasa producen como resultado
gran cantidad de part´ıculas de carbono producto
de la combusti´on. Este humo est´a volum´etricamente
compuesto, en gran medida, por part´ıculas
menores a 1 μm (aunque puede llegar hasta
el orden 1 mm con fuegos muy intensos) [23] que
pueden ser transportadas grandes distancias. Estas
part´ıculas en suspensi´on en el aire, que de manera
gen´erica reciben el nombre de aerosoles, interact
´uan qu´ımica y radiativamente con la atm´osfera
y la radiaci´on que incide sobre ella.
Aunque cualitativamente
las propiedades de las part´ıculas producidas
por los chaqueos est´an bien entendidas, el
efecto que estos y otros aerosoles de origen antropog
´enico y natural puedan tener sobre el clima
no est´a todav´ıa claramente entendido. Algunos tipos
de aerosoles, como los sulfatos, producto de
erupciones volc´anicas por ejemplo, tienen el efecto
de enfriar la superficie terrestre [24] mientras
que otros, como el carb´on negro [25], m´as bien ab-
2 Adaptado de http://en.wikipedia.org/wiki/Air pollution
sorben energ´ıa y refuerzan el efecto invernadero.
El efecto sobre el clima de este tipo de part´ıculas
en suspensi´on es aun m´as complicado pues existen
efectos directos, como son aquellos relacionados
con el enfriamiento o calentamiento de la superficie
terrestre, o indirectos como son aquellos relacionados
con la formaci´on de nubes.
Sin embargo, la quema de material vegetal no
solamente produce humo sino libera a la atm´osfera
una gran cantidad de carbono y otros gases de efecto
invernadero [23]. Si bien el humo puede llevar
a corto plazo a un enfriamiento de la atm´osfera es
probable que a largo plazo el efecto de los gases de
efecto invernadero liberados a la atm´osfera produzca
un efecto neto de calentamiento [26]. Y es que
en realidad el humo y otras part´ıculas producto de
actividad antropog´enica pueden estar inhibiendo,
al reflejar radiaci´on solar por ejemplo, el calentamiento
global, produciendo as´ı un efecto “positivo”
sobre el clima actual. El problema es que, conforme
se hacen esfuerzos para mejorar la calidad del aire
que respiramos, dejamos a la atm´osfera libre de
cualquier “escudo” que re-emita radiaci´on solar hacia
el espacio. Esto podr´ıa acelerar dram´aticamente
el efecto invernadero a corto plazo [27].
Impactos climatológicos del Fenómeno El Niño en América Latina y el Caribe - III
De hecho, en Perú y Colombia, más de 6 de
sus provincias han sido afectadas por más de
1000 eventos desde la década del 70; algunas
hasta por ¡5000 eventos!
Si miramos las estadísticas de América del
Sur y se analiza el ratio de daños con respecto
al PIB, Ecuador, Bolivia, Colombia y Perú presentan
una tasa mayor al 10%, mientras que el
resto de países de la región registran tasas entre
0.1 y 6%, lo que confirmaría la incidencia de
la pobreza como un factor que incrementa las
pérdidas de vidas humanas y económicas.
La pobreza y la inequidad son factores determinantes de la vulnerabilidad de los países de la CAN. El caso de las diferencias entre las poblaciones rurales y urbanas llega a ser alarmante. El porcentaje de pobreza en Bolivia y Perú superó el 62,2 y 67,6% respectivamente en las áreas rurales, y el 37,8 y 32,4% en zonas urbanas. Los impactos que la subregión ya sufre por la variabilidad climática y el cambio climático son diversos y de importantes magnitudes, y se relacionan con todos los ámbitos del desarrollo. Su diversidad tanto en tipo como espacio se representa en los gráficos de las páginas anteriores, siendo los eventos presentados tan sólo una muestra de lo que sucede en la subregión. Los impactos no hubieran sido tan grandes, sin embargo, si no existieran ciertas características que incrementan la vulnerabilidad de los países de la subregión, tales como la presión demográfica; el crecimiento urbano sin planificación; la pobreza, la inequidad y migración rural; la baja inversión en infraestructura y servicios; la degradación de tierras o su deforestación; la contaminación y sobrexplotación de recursos naturales; y los problemas de coordinación intersectoriales y capacidad limitadas de las instituciones. Nuestros países son además especialmente vulnerables ante cualquier modificación en los patrones climáticos, debido a que un porcentaje importante de su economía y de la fuerza trabajadora, depende de actividades primarias sensibles al clima, tales como la agricultura y la pesca, y de sus recursos naturales. La importancia del agro en la economía es especialmente importante.
La pobreza y la inequidad son factores determinantes de la vulnerabilidad de los países de la CAN. El caso de las diferencias entre las poblaciones rurales y urbanas llega a ser alarmante. El porcentaje de pobreza en Bolivia y Perú superó el 62,2 y 67,6% respectivamente en las áreas rurales, y el 37,8 y 32,4% en zonas urbanas. Los impactos que la subregión ya sufre por la variabilidad climática y el cambio climático son diversos y de importantes magnitudes, y se relacionan con todos los ámbitos del desarrollo. Su diversidad tanto en tipo como espacio se representa en los gráficos de las páginas anteriores, siendo los eventos presentados tan sólo una muestra de lo que sucede en la subregión. Los impactos no hubieran sido tan grandes, sin embargo, si no existieran ciertas características que incrementan la vulnerabilidad de los países de la subregión, tales como la presión demográfica; el crecimiento urbano sin planificación; la pobreza, la inequidad y migración rural; la baja inversión en infraestructura y servicios; la degradación de tierras o su deforestación; la contaminación y sobrexplotación de recursos naturales; y los problemas de coordinación intersectoriales y capacidad limitadas de las instituciones. Nuestros países son además especialmente vulnerables ante cualquier modificación en los patrones climáticos, debido a que un porcentaje importante de su economía y de la fuerza trabajadora, depende de actividades primarias sensibles al clima, tales como la agricultura y la pesca, y de sus recursos naturales. La importancia del agro en la economía es especialmente importante.
MITOS Y VERDADES ACERCA DEL CAMBIO CLIM´ATICO EN BOLIVIA - VIII
3.8. La contaminaci´on atmosf´erica urbana
contribuye de forma significativa al
calentamiento global (verdad)
Esta aseveraci´on estuvo en entredicho en los
´ultimos a˜nos debido a que se discuti´o si el di´oxido
de carbono, principal gas de efecto invernadero,
era o no un contaminante atmosf´erico. La t´ıpica
definici´on del t´ermino contaminaci´on atmosf´erica
dice que la misma es “la inyecci´on humana en la
atm´osfera de elementos qu´ımicos, material particu lado o biol´ogico que causa da˜no o molestias a humanos
u otros organismos y/o da˜na el medio ambiente”
2. Dado que el CO2 es un elemento necesario
para la fotos´ıntesis de las plantas y no da˜nino directamente
para la salud humana se arguy´o que este
gas no era un contaminante. Sin embargo, inclusive
la corte de justicia de los Estados Unidos reconoci
´o el a˜no 2007 [22] que el di´oxido de carbono
es un contaminante dado que da˜na el medio ambiente
a trav´es del calentamiento global. Dado que
uno de los mayores contribuyentes a la contaminaci
´on atmosf´erica en las ciudades es la combusti´on
de combustibles f´osiles, est´a claro que la contaminaci
´on atmosf´erica urbana contribuye significativamente
al calentamiento global.
Ahora bien, aparte del CO2, los gases relacionados
con la poluci´on urbana m´as importantes son
el ozono superficial, los ´oxidos de nitr´ogeno y el
mon´oxido de carbono. De todos estos elementos, el
´unico relacionado de manera directa con el efecto
invernadero es el ozono superficial. La contribuci
´on del mon´oxido de carbono est´a relacionada
principalmente a su capacidad de producir metano
y radicales oxhidrilos, elementos importantes en el
efecto invernadero y en la qu´ımica atmosf´erica respectivamente.
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